¿Por qué no es recomendable mirar el celular apenas nos levantamos? 

Revisar el celular es un hábito bastante común de muchas personas al despertarse, ya sea para ver sus redes sociales, correos o alguna otra información. Sin embargo, no es recomendable por los expertos. 

Revisar el celular es un hábito bastante común de muchas personas al despertarse, ya sea para ver sus redes sociales, correos o alguna otra información. Sin embargo, no es recomendable por los expertos. 

Los efectos que puede tener en nuestra salud mental el usar el teléfono antes de dormir y a la primera hora de la mañana son variados. El fundador del Centro para una Tecnología Humana y exdiseñador y exespecialista de ética de Google, Tristan Harris, señaló en 2016 que revisar el celular durante los primeros minutos tras levantarse produce estrés y el cerebro intranquilo.

Cuando nos exponemos a cualquier otra pantalla interactiva el cerebro libera abundante dopamina. Es así que el cerebro intentará repetir la acción a lo largo del día, pues le genera placer.

¿Por qué no es recomendable? 

Interrupción del descanso: al despertar, nuestro cuerpo y mente aún están en un estado de transición entre el sueño y la vigilia. Al mirar el celular de inmediato, nos exponemos a una avalancha de información, notificaciones y estímulos visuales que pueden interrumpir ese proceso de transición y alterar nuestra sensación de calma y tranquilidad al despertar.

Impacto emocional: si lo primero que hacemos al despertar es revisar el celular, estamos abriendo la puerta a influencias externas antes de haber tenido tiempo para conectarnos con nosotros mismos. Esto no es recomendable ya que puede generar estrés, ansiedad o incluso mal humor si nos encontramos con noticias negativas. 

Pérdida de enfoque y productividad:  corremos el riesgo de caer en una especie de «zona de distracción» donde pasamos un tiempo considerable navegando por las redes sociales, revisando mensajes o viendo contenido sin un propósito claro. Esto puede hacer que perdamos tiempo valioso por la mañana.

Desconexión con el presente: nos desconectamos del entorno inmediato y de nuestras propias emociones y pensamientos. Perdemos la oportunidad de comenzar el día con atención plena y de conectarnos con nuestras necesidades físicas y emocionales.

Impacto en el estado de ánimo: podemos experimentar una variedad de emociones que pueden afectar nuestro estado de ánimo durante el resto del día.  

Evitar mirar el celular apenas nos levantamos nos permite preservar un tiempo de tranquilidad, conexión interna y enfoque antes de enfrentarnos a las demandas y distracciones del mundo exterior. Es recomendable cultivar hábitos matutinos más conscientes y saludables, como la meditación, la lectura, el ejercicio o simplemente disfrutar de un momento de silencio para comenzar el día de manera más equilibrada y consciente.

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