Llegan los tan anhelados 40 años para muchas… aunque para otras puede ser una real pesadilla. La mitad de la vida está en el presente y son cada vez más las mujeres que se dan cuenta que no saben qué hacer para tomar las riendas de su salud y volverse más activas. Todo con un mismo fin: alargar los años de vida lo máximo que se pueda, ya sea con alimentos o cambio de vida.
Es por eso que son cada vez más las que arrancan dietas, se ponen las pilas con el gimnasio, arrancan terapia y un montón de cosas más con el fin de ver de qué forma pueden alcanzar mucha más plenitud. Y se comprobó que una de las formas que más puede ayudar a lograr este objetivo es con una dieta balanceada y saludable.
La alimentación representa la vida misma de la persona. Por eso que la frase “dime lo que comes y te diré como eres” aplica tanto en la actualidad. Todos aquellos que deciden comer rápido y no pensar dos veces en lo que se ingieren en el cuerpo reflejan estas decisiones en malos síntomas y en una salud deteriorada. Lo contrario sucede con las personas que sí invierten en su salud, tomando decisiones consientes sobre su comida para aumentar su calidad de vida.
Científicos identificaron cuáles son los diez alimentos que no pueden faltar en la dieta de una mujer que acaba de cruzar sus 40 años. Ellos le aportan vitaminas y minerales al cuerpo que van a terminar por aportarle mucha más calidad a la vida de la persona, y hará que esta su aspecto físico mejore con estas simples incorporaciones.
10 ALIMENTOS QUE NO PUEDEN FALTAR EN LA DIETA DESPUÉS DE LOS 40
1. Cereales integrales: son muchas las que asocian los carbohidratos con el enemigo, ya que consideran que solamente engordan. Pero nada puede estar más lejos de la realidad: los hidratos tienen que comerse en su medida justa y en función de la actividad física que se realice. Y cada vez que se pueda, éstos deben ser integrales. Al aportar mucha más fibra se está contribuyendo a que el sistema digestivo funcione mejor y la flora intestinal se sane. Además aporta mucha más saciedad y es ideal para no estar picoteando entre comidas.
2. Salmón: sí, es carísimo… pero vale cada centavo. El salmón es uno de los alimentos que está lleno de propiedades y minerales que le hacen excelente al cuerpo, en especial al cerebro humano. Su consumo es vital para mantener una buena sinapsis de neuronas y mejora el funcionamiento del sistema linfático. Al aportar buenas cantidades de Omega 3, los huesos se vuelven más fuertes y hasta ayuda a la pérdida de grasa en todo el cuerpo.
3. Té verde: podría ser esencial y muy beneficioso el ingerir al menos una taza de té verde diariamente, puesto que se comprobó que aumenta nuestra tasa metabólica y, por ende, la facilidad para deshacernos del peso. También, fortalece nuestro sistema inmunitario y posee características antioxidantes. Esta bebida es ideal para todas aquellas que están pasando por la época menopáusica, ya que al estar llena de antioxidantes puede ser clave para evitar un poco el deterioro hormonal que hay en este proceso.
4. Frutillas: sin dudas, un alimento que es el mayor aliado del colágeno. Al estar llena de Vitamina C es ideal para consumir durante todo el año. Es una de las pocas frutas que no eleva el nivel glucémico, por lo que es compatible para diabéticas y mujeres que realicen la dieta keto. Además está llena de fibra por lo que ayuda a mejorar los niveles de prebióticos en el intestino.
5. Nueces: todos los frutos secos son ideales para consumir en todos los momentos de la vida, pero al igual que el salmón, las nueces se vuelven prioritarias para las mujeres que tienen más de 40 años. Están llenas de Omega 3 y de magnesio, las cuales se vuelven buenas aliadas para combatir el cansancio y la fatiga, sobre todo en momentos donde el desgaste del cuerpo se siente mucho más.
6. Soja: reducir la ingesta de proteínas animales es vital para el rendimiento del cuerpo. Se comprobó en miles de culturas que viven más de 100 años que una de las claves para lograr esto es eliminar casi por completo las carnes. Pero como la ingesta proteica no tiene que reducirse, la soja toma un papel protagónico. Es ideal para aliviar los sofocos menopaúsicos, disminuir el colesterol y prevenir la pérdida de masa ósea.
7. Yogurt: desde los 40 años comenzamos a disminuir un 0,7% de densidad ósea, así que los productos lácteos en general comienzan a tener relevancia en esta fase de la existencia. Con el propósito de prevenir o disminuir la desmineralización, requerimos una ingesta adecuada de calcio y lo que es más esencial, de vitamina D, la cual facilita una adecuada absorción del calcio. Se puede combinar con frutillas y nueces para hacer de un alimento balanceado y saludable para el cuerpo.
9. Ajo: debemos emplearlo diariamente como parte de todas nuestras comidas por los enormes beneficios que nos proporciona. Se reconoce como un agente antibacteriano natural capaz de fortalecer nuestro sistema inmunológico. Mejora el flujo sanguíneo y nos asiste en la prevención de afecciones cardiovasculares. Además, gracias a un compuesto que lo compone denominado alisina, el ajo nos ayuda a mantener la piel juvenil y suave, reduciendo la inflamación y reparando los tejidos.
10. Huevo: no solo es fascinante por su gran contenido proteico, sino que además es uno de los pocos alimentos de origen animal que no inflaman para nada el sistema intestinal, por lo que su ingesta es recomendable durante todo el día. La clara es muy alta en queratina por lo que la piel, el pelo y las uñas se ven beneficiadas con su ingesta.
